Ismael Zambada García, más conocido como El Mayo, es uno de los narcotraficantes más reconocidos en la historia del crimen organizado en México. Su reciente captura en los Estados Unidos ha generado una gran conmoción debido a su larga trayectoria criminal y su papel como cofundador del cártel de Sinaloa, una de las organizaciones criminales más poderosas y sanguinarias del mundo.
La detención de El Mayo junto a Joaquín Guzmán López ocurrió mientras se disponían a abordar un avión, en una operación conjunta de agencias de seguridad estadounidenses. La detención de Guzmán López se produjo después de que una fuente confidencial del FBI informara sobre su plan de abordar un vuelo privado en El Paso. Durante el procedimiento, Guzmán López reveló que El Mayo también estaría presente, lo que llevó a su eventual arresto.
El Mayo enfrenta múltiples acusaciones en al menos cinco estados de los Estados Unidos. En Nueva York, se le acusa de participar en actividades de crimen organizado y traficar diversas drogas, incluyendo cocaína, marihuana, heroína, metanfetamina y fentanilo. En Texas, específicamente en la Corte de Distrito Oeste, se le imputan cargos de tráfico de cocaína y marihuana, lavado de dinero, posesión de armas de fuego, delincuencia organizada y asesinato. En California, Zambada también es acusado de crimen organizado y tráfico de varias sustancias controladas. En Illinois, enfrenta cargos similares junto a otras figuras prominentes del narcotráfico. Finalmente, en Carolina del Sur, se le acusa de tráfico de cocaína.
La figura de El Mayo ha estado presente en la escena del narcotráfico durante décadas, y su captura es un duro golpe para el cártel de Sinaloa. Sin embargo, la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado en México y los Estados Unidos continúa siendo una tarea pendiente y sumamente complicada.