En un giro inesperado, el presidente del Directorio de TVN, Francisco Vidal, arremetió contra los canales de televisión privados chilenos, tales como Canal 13 y Mega, durante su intervención en la Cámara de Diputados. Vidal afirmó que, sin la televisión pública, los chilenos estarían a merced de conglomerados económicos como Luksic Canal 13 o Heller Mega, o incluso de extranjeros que andan circulando en Chilevisión.
Ante tales declaraciones, Canal 13 respondió con un comunicado en el que tildó las palabras de Vidal como ofensivas y demostrativas de un profundo desconocimiento de la ley que rige a las estaciones de televisión abierta. Asimismo, Mega se unió a la postura de Canal 13, calificando las declaraciones de Vidal como lamentables y preocupantes, y asegurando que buscan sembrar dudas sobre el rol de la televisión privada en Chile.
Chilevisión también emitió un comunicado en respuesta a Vidal, rechazando categóricamente sus palabras y defendiendo el profesionalismo, la independencia, la rigurosidad y la honestidad de sus trabajadores y trabajadoras. Desde Chilevisión, se reafirmó el compromiso con la sociedad chilena y su rol como canal de televisión abierta de mayor credibilidad e independencia.
Es evidente que las palabras de Vidal han causado revuelo en la industria televisiva chilena, y no es difícil entender por qué. Sus comentarios no solo menosprecian el arduo trabajo de cientos de profesionales en los canales privados, sino que también ignoran la gobernanza interna y las líneas editoriales que poseen tanto canales públicos como privados. Además, Vidal parece ignorar que los medios de comunicación privados y estatales desempeñan un rol fundamental en el aporte a la libertad de expresión y en el ejercicio de la labor informativa.
En definitiva, resulta inaceptable que el presidente de TVN intente adjudicarse el rol de garante de la libertad de expresión y la labor informativa como patrimonio exclusivo de su estación. Esperemos que estas declaraciones no sean reflejo del sentir de todo el directorio ni de la administración de TVN, y que en el futuro se eviten comentarios que faltan el respeto a cientos de trabajadores en la industria televisiva chilena.