La noche del fatídico viernes, una espeluznante escena sacudió al puerto de Acapulco, cuando tres individuos fueron brutalmente desmembrados y sus restos abandonados en la cajuela de un taxi del servicio público, en el estacionamiento de un popular centro comercial. Este acto atroz eleva a 20 el número de víctimas en la ciudad en los últimos cinco días de julio, siete de ellas desmembradas, y cuatro lamentables fallecimientos femeninos.
Alrededor de las 22:45 horas, se informó sobre un taxi con número económico 920 y placas A076-FJX, que cubría la ruta de Ciudad Renacimiento, encontrado en el estacionamiento del reconocido Sams Club en la avenida Farallón del fraccionamiento Magallanes. Dentro de la unidad, yacían sin vida los macabros restos de una mujer y dos hombres.
La policía acordonó el área, seguida por la Guardia Nacional, la Policía Investigadora Ministerial y personal de los Servicios Periciales, quienes se encargaron de las diligencias y el levantamiento de los cuerpos, que fueron llevados al Servicio Médico Forense SEMEFO en la zona de El Quemado. Los desafortunados individuos permanecen en calidad de desconocidos.
En otro suceso, un elemento de la Marina Armada de México perdió la vida en una letal balacera en una miscelánea de Ciudad Renacimiento, uno de los barrios más peligrosos de la ciudad.
Acapulco se ve una vez más sacudido por la violencia, y las autoridades trabajan sin descanso para esclarecer estos horribles crímenes y traer a los responsables ante la justicia.