El guardameta argentino, Emiliano Martínez, se convirtió en el auténtico héroe de la albiceleste al atajar dos penaltis decisivos frente a Ecuador, asegurando su pase a las semifinales de la Copa América Al término del encuentro, el portero declaró con orgullo que no tenía intención de abandonar el torneo, afirmando a sus compañeros, familia y niños: Papá no se va a casa.
El Dibu mantuvo su arco intacto hasta el gol de Kevin Rodríguez en el minuto 91, que empató el marcador a 1-1 y forzó la tanda de penaltis. Martínez reconoció la dificultad del partido, elogiando a Ecuador como un equipo joven y agresivo que lucha sin descanso.
Además, el guardameta argentino hizo hincapié en las difíciles condiciones del terreno de juego del estadio NRG de Houston, que describió como muy seco, lo que complicó el juego de Argentina. Sin embargo, el equipo logró salir adelante gracias a las increíbles paradas de Martínez, quien una y otra vez demostró que no estaba dispuesto a abandonar el torneo. Un héroe indiscutible que llevará a Argentina a lo más alto de la Copa América