Descubre a los misteriosos Paniagua, propietarios del terreno vinculado al caso de la desaparición de Loan, investigado por Burlando.

Titular: El misterio de Loan Danilo Peña se profundiza Fernando Burlando y su equipo desvelan una nueva hipótesis impactante

El caso de Loan Danilo Peña, el niño desaparecido en circunstancias aún no esclarecidas, da un giro inesperado. El afamado abogado Fernando Burlando y su equipo de litigantes han esbozado una teoría casi concluyente sobre lo sucedido el trágico 13 de junio. Para los letrados de la parte acusadora, el pequeño de tan solo cinco años fue víctima de un secuestro, y la vía de escape no fue la que originalmente se sospechó. En el centro de esta nueva versión, un personaje clave emerge: Paniagua.

Paniagua, dueño de un campo adyacente a la residencia de la abuela de Loan, Catalina Peña, tiene una salida que conecta directamente con la ruta 12, una ruta que no fue considerada en las pesquisas iniciales. A diferencia de la ruta 123, el camino habitual para llegar a 9 de Julio desde el paraje Algarrobal, esta vía ofrece una fuga rápida y sin obstáculos.

Burlando reveló a TN que este lugar no fue escudriñado por las autoridades, ya que en un principio, la búsqueda se concentró en la dirección opuesta, impulsada por el hallazgo de un botín cerca del lugar de la desaparición. De este modo, no solo el campo sospechoso quedó fuera de la investigación, sino que también se descuidó la ruta 12, la supuesta vía de escape de los secuestradores.

Sin embargo, la atención no se detiene en este acceso poco común. La acusación también destaca una prueba crucial: la relación de los Paniagua con uno de los primeros sospechosos detenidos.

Antonio Benítez, tío de Loan, acompañó a los niños al naranjal y fue el último adulto en ver a Loan antes de su desaparición. Detenido previamente en la investigación, antes que Mónica del Carmen Millapi y Daniel Fierrito Ramírez, Benítez advirtió a José Peña, padre de Loan, sobre el camino hacia la propiedad de Paniagua, mientras este se dirigía en sentido contrario a la búsqueda.

Desde la acusación, se afirma que Benítez está involucrado en la banda detrás del secuestro y que utilizó su confianza con José Peña para desviar la atención de esa vía de escape que nunca fue investigada. Burlando considera a Benítez como uno de los responsables principales, al haber llevado a los niños al naranjal y luego bloquear el camino supuestamente utilizado para el secuestro en automóvil. La acusación está convencida de que Benítez controló la situación en todo momento.