Atención, lectores La historia que están a punto de leer está plagada de violencia explícita y detalles perturbadores. Una historia de belleza engañosa y crímenes atroces cometidos por una pareja que parecía sacada de una caja de juguetes: Barbie y Ken, apodados así por sus rasgos físicos idílicos y su aspecto inofensivo.
Karla Homolka y Paul Bernardo, una pareja que engañó a todos con su apariencia, resultaron ser dos asesinos en serie responsables de múltiples agresiones sexuales y al menos tres asesinatos brutales. Uno de sus crímenes más espeluznantes fue el asesinato de la hermana menor de Homolka, de tan solo 15 años, ocurrido en la víspera de Navidad de 1990. La joven fue violada y asesinada por la misma Karla, quien participó activamente en el plan macabro.
La historia de terror comienza con Karla Homolka, nacida en 1970 en Port Credit, Ontario, y criada en una familia de clase media. Su futuro esposo, Paul Bernardo, nació en 1964 en Scarborough y tuvo una adolescencia marcada por el abuso y la traición. Ambos se conocieron en 1987 en un evento sobre mascotas, y rápidamente iniciaron una relación romántica. Sin embargo, detrás de esa fachada de amor, se escondía una oscuridad aterradora.
Bernardo, conocido como el violador de Scarborough, había cometido una serie de violaciones antes de conocer a Homolka. Después de su encuentro, Bernardo inició a Homolka en su mundo de violencia y abuso, y juntos llevaron a cabo una serie de crímenes que conmocionaron a Canadá y al mundo.
El 23 de diciembre de 1990, Homolka y Bernardo llevaron a cabo su plan para agredir sexualmente a la hermana menor de Homolka, de 15 años, y grabar la escena del crimen. Desafortunadamente, la joven murió durante el ataque, y la pareja trató desesperadamente de encubrir su delito. A pesar de las pruebas en su contra, la policía y los padres de la víctima creyeron la falsa historia de Homolka y Bernardo, y el caso permaneció sin resolver durante meses.
Mientras tanto, la pareja continuó cometiendo delitos atroces, incluidos dos asesinatos más y decenas de agresiones sexuales, muchas de las cuales fueron grabadas en video. No fue hasta 1993 que la verdad salió a la luz, gracias a la intervención de un conocido de Bernardo y a la eventual colaboración de Homolka con las autoridades.
Bernardo fue sentenciado a cadena perpetua, mientras que Homolka recibió una sentencia más leve a cambio de su cooperación con la investigación. Sin embargo, la liberación de Homolka en 2005 y su posterior reaparición en la vida pública generaron indignación y controversia.
Este es el caso de Barbie y Ken, una historia que muestra cómo la belleza superficial puede ocultar una verdad aterradora y cómo la codicia y el deseo de poder pueden llevar a cometer los crímenes más atroces. No se pierdan la serie documental Ken y Barbie asesinos: las cintas perdidas para más detalles de este escalofriante caso