Semanas atrás, Austria comenzó a respirar aliviada cuando Ralf Rangnick, objeto de negociaciones exhaustivas por parte del Bayern de Múnich para suplir a Thomas Tuchel, rechazó la oferta para continuar al frente del equipo nacional. Aunque algunos encontraron su decisión incomprensible, los alemanes la consideran natural, ya que Rangnick es visto como un visionario del fútbol y un transformador de equipos en su país.
La vinculación de Rangnick con el Bayern generó escepticismo en el extranjero, especialmente después de su paso por el Manchester United, donde fue director deportivo y entrenador interino. Sin embargo, en Alemania, su reputación es intachable, y su éxito como director deportivo en el Red Bull Leipzig y el Salzburgo es indiscutible.
El lunes, en el debut de Austria en la Eurocopa, Rangnick demostró su valía al poner en aprietos a Francia, una de las favoritas para ganar el torneo. Aunque Francia ganó gracias a un autogol de Wöber, Austria dominó el juego y mostró una presión alta y un marcaje individual que sorprendió a muchos.
Rangnick no es un imitador, sino un innovador que ha desarrollado su propio estilo de juego, el cual ha influido en entrenadores como Jürgen Klopp y Julian Nagelsmann. Su enfoque se basa en tener el balón y encontrar rápidamente el camino a la portería, con movilidad y desmarques a las espaldas. Su ideología ha transformado al Red Bull Leipzig y al Salzburgo, y ahora está haciendo lo mismo con Austria.
El meta Patrick Penz dijo a Mundo Deportivo que Rangnick les pidió jugar a lo que saben y mantener su filosofía como equipo. Confían en el plan de Rangnick y creen que su éxito es probable en el futuro. Con la filosofía de Rangnick, Austria puede dar la sorpresa en la Eurocopa.