Neymar, el atacante del equipo saudí de fútbol Al-Hilal, ha organizado una subasta de objetos personales para recaudar fondos destinados a programas sociales, a pesar de las críticas recibidas por un controvertido proyecto de privatización de playas. La subasta, llevada a cabo por el Instituto Neymar Jr. en un club deportivo exclusivo de São Paulo, Brasil, incluyó botas de oro de 18 quilates, camisetas autografiadas de FC Barcelona y París Saint-Germain, y experiencias únicas con el propio Neymar.
Entre los artículos subastados, se encontraban botas bañadas en oro y decoradas con piedras preciosas, camisetas firmadas por Neymar y excompañeros como Mbappé y Messi, y experiencias exclusivas, como jugar póker con el futbolista, conducir en el kartódromo de su mansión en la playa y asistir a un partido del Al-Hilal en Riad.
Esta no es la primera subasta organizada por la fundación de Neymar, que se centra en proyectos educativos para niños de familias desfavorecidas en el barrio donde creció el futbolista en Praia Grande, São Paulo. Sin embargo, el evento ha tenido lugar en medio de una ola de críticas al delantero, quien se ha visto envuelto en una polémica por un proyecto de ley que permitiría la privatización de áreas adyacentes a las playas, actualmente propiedad del Estado brasileño.
La actriz Luana Piovani ha sido una de las primeras en acusar a Neymar de estar involucrado en el proyecto, que podría beneficiarlo económicamente, ya que el futbolista recientemente anunció su participación en los planes de una constructora para construir edificios de lujo frente al mar en el norte de Brasil. Neymar respondió a Piovani llamándola loca y pidiéndole que se callara, lo que solo ha avivado la polémica y aumentado el número de críticas de otros famosos brasileños en su contra.