CINCUENTA Y TRES AÑOS DE LUZ SOBRE SUS HOMBROS Y UNA POSICIÓN DE PODER QUE UTILIZÓ PARA COMeter LAS PEores ATROCIDADES MÁLAGA, SPAIN - 3 DE JUNIO.
La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 61 años en la provincia de Málaga por una serie de delitos de agresión sexual continuada que se remontan al año 1999. El individuo, con aire de confianza y autoridad, se aprovechó de su posición como presidente de una comunidad de creyentes para ganarse la confianza de sus víctimas y cometer estos actos aberrantes.
La autoridad judicial ha ordenado el ingreso en prisión del sospechoso, al que se le atribuyen, hasta la fecha, dos delitos de agresión sexual. Sin embargo, la investigación sigue abierta y no se descarta la posibilidad de que aparezcan nuevas víctimas, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
Todo comenzó con la denuncia de una de las víctimas por un presunto delito de agresión sexual. El relato del perjudicado reveló que el agresor afirmaba que su psicólogo le aconsejaba explorar y saciar su curiosidad para superar la atracción que sentía hacia los hombres. Bajo coerción yo intimidación, el sospechoso forzaba a la víctima a ceder a sus deseos sexuales.
Gracias a las pesquisas de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer UFAM, el presunto autor fue identificado. El individuo era el presidente de una asociación dedicada a tratar aspectos relativos a la fe y su aplicación en la vida diaria. Aprovechándose de la situación sociopolítica de otros países, captaba a la mayoría de sus socios en zonas con complicaciones y, a través de las redes sociales, adquiría información detallada sobre la vulnerabilidad de las posibles víctimas.
Ofreciendo un futuro europeo y amparo emocional y espiritual, el sospechoso logró atraer a dos víctimas, a las que trasladó a un país europeo con la promesa de un futuro mejor. Una vez en España, las víctimas fueron manipuladas emocional y psicológicamente, y se vieron obligadas a permitir que el agresor cometiera sus actos ilícitos, enfrentándose a situaciones aterradoras y humillantes.
Tras un operativo policial, el sospechoso fue localizado y detenido, y posteriormente puesto a disposición judicial, que ordenó su ingreso en prisión. La Policía Nacional continúa investigando para descubrir si hay más víctimas y garantizar que este individuo sea llevado ante la justicia.