Desesperación en la familia de Pedro Celestino Fernández, un hombre de 64 años que ha desaparecido sin dejar rastro en la ciudad de San Salvador, Argentina El último avistamiento del señor Fernández, un mozo de un restaurante en el barrio Gorriti, fue hace más de 18 días, el 11 de mayo, cuando dos oficiales de la Seccional 4° del Barrio Cuyaya lo detuvieron por su estado de ebriedad.
La familia del desaparecido está quebrantada y exige respuestas. Teodolinda Vilte, cuñada de Fernández, declaró a TN: Nunca llegó a casa ni sabemos dónde está, queremos saber qué pasó con Celestino. El hombre, descrito como un individuo de 1.60 metros de altura, cabello corto y complexión delgada, trabajaba todos los días hasta las 16 horas y, a pesar de su adicción al alcohol, siempre regresaba a casa.
La familia está intrigada y preocupada, ya que esta es la primera vez que Fernández desaparece durante tanto tiempo. Vestía un buzo verde con escote en V, una camisa debajo, pantalones oscuros y zapatos negros cuando fue liberado el domingo por la mañana. La policía y los familiares están investigando varias hipótesis, incluyendo la posibilidad de que haya perdido la memoria o que haya sido víctima de violencia policial.
En un caso similar, Luis Quesada, un remisero de 58 años, fue encontrado muerto en la localidad de Caimancito, Jujuy, el 31 de marzo, después de haber desaparecido a fines de marzo en la ciudad salteña de Pichanal. Tres personas, entre ellas una madre y su hijo, fueron detenidas en relación con el homicidio. El coche de Quesada, un Chevrolet Corsa, fue encontrado desmantelado y vendido por partes en un terreno baldío del barrio El Triángulo, de la ciudad jujeña de General San Martín. La policía está investigando y ha arrestado a tres sospechosos, incluyendo a un joven de 23 años y a su madre, quienes permitieron el uso de su terreno para desmantelar el auto.