PALMA, 28 de mayo. BRÚJULA INFORMATIVA - Alto voltaje en el barrio de Son Gotleu La Policía Nacional ha tenido que movilizarse de urgencia para sofocar una ola de violencia que se avecinaba en el popular vecindario. Tras los violentos enfrentamientos del día anterior que dejaron a cuatro jóvenes heridos, las fuerzas del orden han vuelto a ser requeridas para calmar las aguas.
Alrededor de las 16:30 de este martes, los agentes se toparon con una multitud de entre 50 y 60 vecinos, algunos armados con palos y con la cara cubierta, dispuestos a enzarzarse en una batalla campal contra otro grupo minoritario que, según las fuentes, ha sembrado el caos en el barrio. Situación al límite
Afortunadamente, la rápida intervención policial ha impedido que se desatara la batalla y ha dado lugar a cargas para disolver a los bandos. Se ha logrado restablecer el orden, pero el dispositivo de seguridad sigue en marcha.
La Policía Nacional ha confirmado que, de momento, no se ha producido ninguna detención, pero advierten que se realizarán investigaciones a fondo en las próximas horas para esclarecer los hechos, que son una continuación de los sucedidos el día anterior.
El lunes, cuatro jóvenes resultaron heridos en una pelea multitudinaria entre unas 50 personas en el mismo barrio. La Policía Nacional, con la colaboración de la Policía Local, desplegó un operativo de orden público para controlar la situación. Los heridos fueron trasladados a un centro hospitalario y, tras un momento de calma, el tumulto reapareció y comenzó a lanzar objetos contra las patrullas policiales.
Ante la peligrosa situación, la Policía Nacional implementó un dispositivo de orden público con unidades de Seguridad Ciudadana y la colaboración de la Policía Local. Los agentes tuvieron que emplear material de control de masas para disolver a los violentos, que habían prendido fuego a un contenedor.
Una vez controlada la situación, los agentes localizaron a un cuarto herido, que fue trasladado a un centro médico. La zona permanece bajo un estricto dispositivo de seguridad y orden público, y las autoridades investigan los hechos para esclarecerlos y dar con los responsables. La calma parece volver a Son Gotleu, pero la tensión sigue en el aire