Drama y violencia en el municipio de Escobedo, Nuevo León, donde un joven de tan solo 15 años perdió la vida en medio de una lluvia de balas La noche del lunes, el adolescente fue sorprendido por un automóvil blanco, del que descendieron sicarios sin escrúpulos que le dispararon sin piedad en repetidas ocasiones.
La escena fue desgarradora: el joven yacía en la calle San Pedro, entre San Martín y San Ignacio, en la colonia San Miguel, víctima de una brutal agresión que acabó con su vida. Los vecinos, aterrorizados, se refugiaron en sus casas al escuchar las letales ráfagas de bala.
La policía y los servicios de emergencia llegaron al lugar tras el reporte de disparos y encontraron al joven sin signos vitales. Los peritos de la Fiscalía General de Justicia recolectaron más de 30 casquillos en el lugar de los hechos, que ahora son analizados en el laboratorio en busca de pistas que lleven a los responsables de este crimen atroz.
Mientras tanto, la familia del joven llegó al lugar para identificarlo y llevar a cabo los trámites funerarios. La comunidad está conmocionada y exige justicia por este lamentable suceso que enluta a una familia más en Nuevo León.
Y mientras esto ocurría, el sábado pasado, Nuevo León encabezó la lista de homicidios en México con 9 muertes violentas, y un camión de la ruta 214 volcó en Guadalupe, dejando al menos 10 lesionados. La violencia no cesa en el estado y la sociedad se pregunta: hasta cuándo