Amanece en la ciudad y Nelsy Rosero, subintendente con 13 años de servicio en la Institución, mira con ternura a su hija mientras duerme plácidamente. Un beso en la frente y unas lágrimas que se esfuerza en contener son el adiós de una madre que se enfrenta a la jornada diaria con valentía y coraje.
Su maleta en mano y los pendientes laborales en mente, Nelsy es una de las heroínas que conforman la familia Verde Oliva. Su trabajo en el Grupo de Telemática del Departamento de Policía Valle no impide que asuma su rol de madre cuando su hija duerme, convirtiéndose en el motor que la impulsa a seguir adelante.
Pero no es la única en esta ardua tarea de conciliar la vida personal y laboral. La comandante de Distrito de Cartago, teniente coronel Martha Liliana García Puerta, también desempeña una doble función como madre de tres hijos, quienes perdieron a su padre en actos de servicio.
Estas dos valientes mujeres, junto a otras tantas, se enfrentan a la delincuencia y al desafío de ser madres en ausencia, luchando contra las corrientes emocionales que esto conlleva. Sin embargo, su compromiso con el país y la sociedad las mantiene firmes en su propósito de construir un futuro mejor para sus hijos y para la nación.
Reconocen que no es una tarea fácil, pero con la determinación de todas unas guerreras, salen a desempeñar su labor de proteger el orden y la seguridad de la sociedad. A pesar de las dificultades, saben que al final del día, hay una personita especial que las espera en casa y por la que vale la pena luchar.
En el Comando del Departamento de la Policía Valle, extendemos un cálido saludo a todas las madres vallecaucanas en su día. Gracias por ser el motor de cada familia y por su valiosa contribución a la sociedad
Feliz día a todas las mamás