Frenética persecución a Tether Pánico por la establecoin más popular

En un reciente podcast, Brad Garlinghouse, CEO de Ripple Labs, sembró el pánico al afirmar que las autoridades estadounidenses tienen en la mira a Tether Limited, la compañía detrás de la stablecoin USDT. Sin embargo, Paolo Ardoino, director ejecutivo de Tether Limited, salió al paso para desmentir estas acusaciones, calificándolas como un intento de sembrar miedo por parte de Garlinghouse, cuya empresa se encuentra bajo investigación por la SEC y busca lanzar su propia stablecoin.

Ardoino defendió la sólida estabilidad y las altamente líquidas reservas de USDT, así como su cumplimiento regulatorio y su colaboración con las fuerzas del orden globales. Además, recordó que USDT respeta la lista OFAC y trabaja con Chainalysis para monitorear proactivamente las transacciones y prevenir actividades ilícitas.

Esta noticia surge en medio de una creciente presión regulatoria sobre las empresas de criptomonedas en los Estados Unidos, y mientras Ripple Labs se prepara para lanzar su propia stablecoin en diciembre. Otras empresas, como PayPal, también han entrado en el mercado de las stablecoins.

Sin embargo, Ardoino argumenta que Tether Limited no debería ser objeto de una cruzada regulatoria, ya que ha colaborado con más de 120 agencias policiales en más de 40 países y ha bloqueado más de 1.300 millones de dólares en transacciones sospechosas.

Esta situación se produce en un contexto de creciente preocupación por el uso de stablecoins como USDT para actividades ilícitas, como el lavado de dinero. La ONU advirtió este año sobre este problema, y se presentó un proyecto de ley en los Estados Unidos para regular las stablecoins y establecer límites a su emisión.

En resumen, mientras Garlinghouse intenta generar incertidumbre sobre el futuro de Tether Limited, Ardoino defiende su cumplimiento regulatorio y su compromiso con la transparencia y la lucha contra las actividades ilícitas. Solo el tiempo dirá cómo se desarrollará esta situación en medio de un escrutinio regulatorio cada vez mayor sobre las empresas de criptomonedas en los Estados Unidos.