El fervor madridista se desborda por la final de la Champions y el Real Madrid se ve obligado a sortear entre sus socios las codiciadas entradas para el gran evento del próximo 1 de junio en Wembley, Londres. Un acontecimiento que pondrá a prueba la suerte de los socios, ya que las peticiones superan en gran medida a las localidades disponibles
Este lunes, a las 12:00 en punto, concluyó el plazo para solicitar las entradas, con un máximo permitido de seis por socio. Sin embargo, la demanda alcanzó las 25.000 peticiones, una cifra que deja en claro el fervoroso entusiasmo de los aficionados por acompañar al equipo en este épico enfrentamiento.
El martes, a las 12:00 horas, tendrá lugar un sorteo notarial en la Ciudad Real Madrid, donde se decidirá el destino de las entradas. Los afortunados serán notificados a través de la web oficial del club, recibiendo un número de petición que determinará su participación en la final londinense.
Las entradas, como en la final anterior, serán nominativas y en formato digital. La gestión de registro y el pago se llevarán a cabo en el portal de venta de entradas de UEFA, mediante códigos de acceso facilitados por el club. Una vez completado el pago, UEFA no aceptará cambios ni devoluciones.
La UEFA enviará las instrucciones de descarga de las entradas a los correos electrónicos de los socios agraciados durante la semana de la final, las cuales se realizarán a través de la APP de Ticketing de UEFA.
El club ya había anunciado previamente que las entradas serán intransferibles y sólo podrán ser utilizadas por el socio adjudicatario, prohibiéndose su cesión o venta a terceras personas. Todas las entradas se registrarán con el nombre y apellidos del adjudicatario, y cualquier entrada que se registre con otro nombre será anulada.
La organización solicitará la documentación necesaria para comprobar la titularidad de las entradas en el acceso al Estadio, y no se permitirá el acceso de aquellos aficionados que no cumplan estas condiciones. Además, los socios agraciados deberán viajar con pasaporte en vigor y una validez mínima de 6 meses desde la fecha de entrada al Reino Unido. Prepárense, socios, la suerte está echada y solo unos pocos podrán disfrutar de la gloria en Wembley