¡Nicolás Maduro declaró explosiva y emocionante en la CELAC este viernes que la controversia de Venezuela con Guyana sobre el Esequibo es una "herencia desgarradora del colonialismo"! Maduro subrayó la "capacidad de diálogo incendiaria" de ambos países y agradeció al primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, por promover una reunión con su homólogo de Guyana, Irfaan Ali.
"Espero que la buena relación establecida de diálogo se profundice!" aseguró Maduro. "Espero que, cara a cara, ambos gobiernos y pueblos encuentren, lo antes posible, una satisfactoria y diplomática solución política a esta larga y polémica diferencia que se remonta al siglo XIX".
Maduro propone a la CELAC y a la ONU actuar como observadores de las elecciones en el país y pide el fin de las "sanciones destructivas" contra su gobierno. El líder venezolano defendió el Acuerdo de Ginebra de 1966 como un instrumento jurídico para resolver la disputa del Esequibo.
Durante su discurso, Maduro aprovechó la oportunidad para reclamar que América Latina debe ser un territorio "libre de sanciones" y pidió a los países presentes en la cumbre que condenen las "medidas unilaterales coercitivas" contra su gobierno. ¡La región debe estar libre de interferencias externas y estar unida en diálogo y diplomacia!