
El RCD Espanyol continúa cosechando éxitos en este inicio de campaña, después de alcanzar siete de doce puntos posibles en las dos primeras citas ligueras. El plantel catalán ha conseguido un prometedor triunfo sobre el Atlético de Madrid y un empate en casa de la Real Sociedad, aunque el desarrollo global del choque deja un regusto agridulce en los seguidores periquitos.
Los blanquiazules han demostrado dos caras muy diferentes durante el partido. La primera hora de juego ha sido magnífica, con un Espanyol dueño del balón y el control del encuentro, sin dar resquicios defensivos a los donostiarras. El gol de Pere Milla al principio del partido y el posterior penalti transformado por Puado encarrilaban el duelo hasta el descanso.
Sin embargo, los últimos treinta minutos resultaron nefastros para los intereses del conjunto catalán. Un error de Omar El Hilali cerca del área pequeña y un posterior rechace propiciaron el gol local de Barrenetxea en el minuto 62. Poco después, Óskarsson igualó el marcador. De esta forma, la racha sin victorias en el estadio del equipo vasco se prolonga hasta los diez años.
A pesar de la decepción, cabe resaltar el papel de Pere Milla, quien ha anotado dos goles en las dos primeras jornadas y se ha convertido en una pieza clave en el esquema ofensivo de Manolo González. Con dos partidos disputados y seis goles en contra, el Espanyol se prepara para seguir escalando posiciones en la tabla clasificatoria.,