
Un número considerable de narcotraficantes confesos, incluidos al menos 23 mexicanos, están actualmente en libertad en los Estados Unidos después de colaborar con el gobierno en casos contra otros presuntos delincuentes. Estos individuos fueron antes líderes o miembros destacados de cárteles mexicanos responsables de delitos graves como tráfico de drogas, ejecuciones y lavado de dinero.
Entre los casos más notables se encuentran los de Óscar Orlando Nava Valencia, conocido como El Lobo, ex jefe del Cartel del Milenio, y Elpidio Mojarro Ramírez, El Pilo, contador de confianza del mismo cártel. Ambos fueron extraditados a los Estados Unidos y luego liberados después de cooperar con la justicia y proporcionar información clave en varios casos importantes.
Otros exempleados del Cartel de Sinaloa también han obtenido su libertad después de colaborar con el gobierno estadounidense. Estos incluyen a Sergio Villarreal Barragán, El Grande; Jesús Zambada García, El Rey; Vicente Zambada Niebla, El Vicentillo; Harold Poveda, Conejo; Pedro Flores; y Tirso Martínez, El Futbolista. Todos fueron acusados de tráfico de drogas y otros delitos relacionados, pero fueron liberados después de proporcionar información valiosa a las autoridades.
Es importante destacar que muchos de estos individuos cooperaron en casos contra figuras prominentes del mundo del narcotráfico, como Genaro García Luna, ex secretario de Seguridad Pública en México, y Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, ex jefe del Cartel de Sinaloa.
Esta lista de colaboradores en libertad podría incluir pronto a los hijos de El Chapo, Ovidio y Joaquín Guzmán López, quienes se espera que se declaren culpables de cargos de narcotráfico a cambio de beneficios procesales. Los hermanos Guzmán López fueron cabecillas de Los Chapitos, la facción del Cártel de Sinaloa conformada por los hijos del ex jefe del grupo delictivo Joaquín Guzmán Loera.
A medida que estos y otros casos de narcotráfico continúan desarrollándose, es probable que el número de colaboradores en libertad siga creciendo. Mientras tanto, las autoridades estadounidenses y mexicanas seguirán trabajando juntas para combatir el crimen organizado y llevar a los responsables ante la justicia.,