El doble crimen perpetrado en 1989 en una mansión de Beverly Hills por los hermanos Erik y Lyle Menéndez, de 19 y 21 años, contra sus padres Kitty y José, conmocionó a los Estados Unidos por la brutalidad del acto. Tres décadas después de su condena a cadena perpetua, los hermanos vuelven a ser noticia con el estreno de la serie Monstruos: La historia de Lyle y Erik Menéndez de Ryan Murphy en Netflix. Esto ha llevado a Kim Kardashian a abogar por su liberación.
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El caso de los Menéndez ha sido objeto de numerosos programas de crímenes reales y ha sido contado una y otra vez. Sin embargo, no fue hasta el 2024 que el mundo volvió a recordar el espeluznante doble homicidio. El jueves 3 de octubre, la Fiscalía de Los Ángeles anunció que revisará nuevas pruebas del caso, aunque recordemos que, según la sentencia, no tienen derecho a libertad condicional.
Tras el anuncio de la fiscalía, Kim Kardashian publicó un artículo en NBC News en el que defiende y pide la liberación de Erik y Lyle Menéndez, ahora de 53 y 56 años, argumentando que no son monstruos y que fueron condenados antes de que su juicio comenzara. La historia de los hermanos se convirtió en un espectáculo para la nación y su sufrimiento y acusaciones de abuso fueron ridiculizadas en sketches de Saturday Night Live, señala la empresaria.
La socialité también criticó a los medios de comunicación y programas de entretenimiento por presentar a los hermanos como monstruos y ridiculizar su sufrimiento y acusaciones de abuso. La ex de Kanye West utilizó su influencia en Instagram con 360 millones de seguidores para pedir su liberación. Todos somos producto de nuestras experiencias. Ellas dan forma a quiénes fuimos, quiénes somos y quiénes seremos. Fisiológica y psicológicamente, el tiempo nos cambia, y dudo que alguien diga ser la misma persona que era a los 18 años, escribió en la descripción de una publicación en Instagram con una foto de los hermanos en su juventud.
Según nuevas hipótesis y detalles del caso de Erik y Lyle Menéndez, los jóvenes habrían denunciado abuso sexual por parte de sus progenitores que no fueron tenidos en cuenta por las autoridades de la época. Kim Kardashian visitó a los convictos en la cárcel como parte de un programa carcelario y se reunió con un grupo de alrededor de 40 reclusos, incluidos Erik y Lyle. Erik Menéndez había tenido problemas previos con Ryan Murphy, el creador de la serie de Netflix y una persona cercana a la empresaria. Según el convicto, Murphy presentó una historia ingenua e inexacta y lo hizo ver como un monstruo, ignorando las acusaciones que él y su hermano hicieron contra sus padres.,