Un ladrón intentó robar una casa en la localidad de Merlo, en la provincia de Buenos Aires, pero fue capturado por el dueño de la propiedad, un sargento del Ejército Argentino. El delincuente fue entregado a la Policía, pero murió mientras era trasladado a la comisaría local. Ahora, la Justicia investiga las causas de su fallecimiento.
El robo ocurrió en la calle La Prensa al 100, en San Antonio de Padua, donde el ladrón ingresó a una vivienda y fue visto por el dueño a través de las cámaras de seguridad. El dueño alertó a la Policía y logró reducir al delincuente, quien según las fuentes policiales, se encontraba muy agitado y casi queda atrapado en la reja.
Mientras esperaba la llegada de los efectivos, el dueño decidió rociar al ladrón con gas pimienta. Sin embargo, el hombre perdió la vida mientras se encontraba dentro del patrullero.
Según medios locales, el detenido se puso violento durante el trayecto al patrullero, pateando las puertas y golpeando su cabeza contra la reja de separación. Al llegar a la comisaría 2ª de Padua, el jefe de Turno constató que el hombre estaba inconsciente y ordenó que fuera llevado al hospital Eva Perón de Merlo.
Pese a los esfuerzos por salvarlo, el acusado murió antes de llegar al centro de salud. La investigación del caso fue asignada a la Ayudantía Especializada en Violencia Institucional, y se ordenó una autopsia para determinar las causas de su muerte.
El trabajo pericial quedó a cargo de la Gendarmería, y se investigará si el fallecido estaba bajo los efectos de drogas o alcohol en el momento del suceso. Se desconoce si la muerte se produjo por causas naturales, por la acción de alguna sustancia o por violencia institucional. Todos los agentes que participaron en el procedimiento están identificados, y la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense también interviene en la causa.,