De acuerdo con la empresa en cuestión, resulta ridículo aseverar que una plataforma o su titular tengan responsabilidad alguna en el mal uso que terceros puedan hacer de la misma. En mi opinión, esta postura podría resultar cuestionable, ya que las plataformas tecnológicas deben asumir cierta responsabilidad en el contenido que se comparte en ellas, especialmente si este es dañino o ofensivo. De lo contrario, se corre el riesgo de fomentar un entorno digital insalubre y poco seguro.