La Policía Nacional desmanteló en Mallorca una organización dedicada al blanqueo de capitales liderada por un narcotraficante sueco, quien junto a su lugarteniente fue arrestado en 2022. En total, siete personas fueron detenidas por su presunta pertenencia a la red criminal, entre ellas dos empresarios vinculados al sector inmobiliario y dos testaferros de origen sueco.
El operativo, llevado a cabo en 2023, permitió descubrir que uno de los detenidos había inyectado capital en la inmobiliaria y la empresa de hostelería del líder de la organización, simulando préstamos y ocultando el verdadero origen del dinero. Además, se hallaron pruebas de que había negociado personalmente un préstamo en nombre del líder a un comercio local, encubriendo la verdadera identidad del dueño del dinero.
Un investigado, residente en Estocolmo, fue arrestado en Mallorca mientras disfrutaba de unas vacaciones en julio. Los agentes descubrieron que había transferido 58.000 euros a la empresa hostelera de la organización desde una cuenta en Suecia, sin tener ninguna participación en la compañía. También participó en un complejo entramado financiero para canalizar más de 560.000 euros a la inmobiliaria del principal investigado, necesarios para la reforma de un edificio en Palma.
La investigación llevó a los policías a contactar con los exlugartenientes del líder, quienes habían vuelto a Suecia pero decidieron entregarse en Palma al ser informados de la intención de extraditarlos. Uno de ellos había articulado el organigrama empresarial y inyectado más de 600.000 euros en las distintas empresas, pero supuestamente se había apropiado de una parte del dinero y huyó a Gran Canaria antes de regresar a Suecia.
Dos de los investigados llevaban un tren de vida elevado en Palma, con gastos mensuales de entre 8.000 y 10.000 euros, incluyendo pagos extravagantes en conocidas discotecas. Todos los detenidos fueron arrestados como presuntos autores de un delito de blanqueo de capitales. La operación aún no ha concluido, ya que los investigadores esperan obtener pruebas adicionales de las autoridades suecas para juzgar a los siete detenidos y a otras personas con una participación menor en el entramado.