Una vez más, este martes, después del lunes festivo, el alcalde Mikhail Krasnov intentó notificar al director general del Colegio de Boyacá, Javier Emigdio Parra Arias, sobre su declaración de insubsistencia. Sin embargo, Parra no se encontraba en la sede central del colegio, ya que había estado trabajando en otras ubicaciones del importante plantel educativo de la capital boyacense.
La dificultad en remover a Parra del cargo radica en una denuncia de acoso laboral que presentó contra el alcalde, argumentando que Krasnov ha estado en contra de su trabajo desde su discurso de posesión. Además, el mandatario le solicitó la renuncia el 5 de enero y le pidió convocar una sesión del Consejo Directivo para proponer la selección de una nueva terna de rectores.
Parra cumplió con la solicitud, pero advirtió que no se podría continuar con el proceso hasta que se resolviera su queja de acoso. La Procuraduría devolvió el caso al comité de convivencia laboral del colegio, pero este no pudo analizarlo porque el alcalde no forma parte del personal del plantel. El comité devolvió entonces la queja a la Procuraduría, y finalmente, fue enviada a la alcaldía para su consideración.
Es importante recordar que este tipo de situaciones pueden afectar la salud de cualquier persona involucrada. El alcalde debe tener en cuenta las consecuencias de sus acciones y buscar una solución pronta y justa para todas las partes involucradas.