Una organización criminal dedicada al tráfico de cocaína, supuestamente, ha sido desmantelada gracias a la cooperación entre la Policía Nacional de España y la Policía Judiciaria de Portugal. Los narcotraficantes tenían la costumbre de esconder la droga en cajas de piñas dentro de contenedores comerciales que viajaban desde Sudamérica hasta España, pasando por puertos portugueses y luego por carretera hasta diferentes puntos de la geografía española.
La investigación comenzó en mayo de este año, cuando un contenedor procedente de Costa Rica y cargado con fruta llegó al Puerto de Setúbal en Portugal. La atención de las autoridades se despertó cuando sospecharon que el contenedor podría contener drogas entre la mercancía legal.
Tras una cuidadosa coordinación, las autoridades controlaron la llegada del contenedor a España y su posterior traslado a un punto de la Zona Franca de Barcelona. Durante la operación, dos personas fueron detenidas por su presunta participación en el narcotráfico mientras se acercaban al contenedor durante su descarga.
Después de examinar el contenido del contenedor, los agentes incautaron un total de 211 kilogramos de cocaína, que se encontraban ocultos en 589 paquetes rectangulares. Poco después, la tercera persona sospechosa, supuestamente el destinatario final de la mercancía, también fue detenida.
Esta operación es un claro ejemplo de la eficaz cooperación entre las fuerzas del orden de diferentes países en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado.