La exconsejera para las Regiones, Sandra Ortiz, se mostró visiblemente afectada al acusar a algunos medios de comunicación de poner en peligro su vida y la de sus dos hijas, al perseguirla y exponer su caso en sus noticias recientes. Este incidente ocurrió mientras llegaba al búnker de la Fiscalía, donde fue convocada para declarar en calidad de investigada, relacionada con el caso de corrupción en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres UNGRD.
Ortiz, acompañada por su abogado Pedro Enrique Aguilar, expresó su profunda tristeza por las acciones de ciertos medios y afirmó ser una persona sincera que ha llegado a donde está gracias a su honestidad. Además, instó a los periodistas a presentar cualquier prueba en su contra a la Fiscalía, si la tienen, y les pidió que dejen de dañar a su familia.
La exsenadora del Partido Alianza Verde renunció a su cargo en el Gobierno Nacional después de ser mencionada por el exdirector de la UNGRD, Olmedo López, y el exsubdirector de desastres, Sneyder Pinilla, quienes la señalaron como la supuesta mensajera que entregó 3.000 millones de pesos al expresidente del Senado Iván Name.
Actualmente, la Fiscalía lleva a cabo investigaciones en las que participan la fiscal 79 especializada contra la corrupción, Andrea Muñoz, y la fiscal novena delegada ante la Corte Suprema de Justicia, María Cristina Patiño. Estas fiscales ya han imputado cargos por este escándalo a Olmedo López, Sneyder Pinilla y al contratista Luis Eduardo López. Sandra Ortiz, exfuncionaria de confianza de Carlos Ramón González, director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República, asistió al búnker de la Fiscalía por su propia iniciativa para aclarar su presunta participación en el caso de corrupción en la UNGRD.