Rebeca Ghigliotto Villar fue una actriz nacional muy talentosa y versátil, reconocida por su habilidad para interpretar una gran variedad de personajes en dramas y comedias por igual. Nació el 18 de enero de 1954 y estudió actuación en la Universidad de Chile en 1975. Comenzó su carrera en el teatro, donde destacó por su interpretación de Ofelia en una producción de Hamlet de la Universidad Católica en 1979.
Rebeca siempre había tenido un gran interés por la actuación, gracias en gran parte a su abuela, quien la llevaba a ver óperas y obras de teatro cuando era niña. En una entrevista con Alfredo Lamadrid en Humanamente Hablando, Rebeca dijo: Ella fue la que, en el fondo, me cultivó este bichito del teatro.
Rebeca hizo su debut en la televisión en la telenovela Los Títeres en 1984 y pronto se convirtió en una cara familiar en las pantallas de Canal 13. Al año siguiente, obtuvo su primer papel protagónico en la telenovela Matrimonio de Papel, donde actuó junto a Bastián Bodenhöfer. La pareja se reunió nuevamente en Ángel Malo en 1986, donde Rebeca interpretó a Paula Bravo.
Durante su carrera, Rebeca fue parte de varias teleseries, incluyendo La Invitación, Semidiós, Ellas por Ellas, Doble Juego, Amor a Domicilio, Adrenalina, Eclipse de Luna, Amándote, y Fuera de Control. También exploró su faceta cómica con el personaje de Gaby en el sketch La Vicky y la Gaby, que creó junto a su colega Gloria Münchmeyer para el programa de humor del canal, Mediomundo.
En el ámbito teatral, Rebeca participó en varias obras, incluyendo La Vida Privada y Esperando la carroza. También impartió clases de actuación en la Escuela de Teatro de la Universidad Diego Portales.
Sin embargo, la carrera de Rebeca se vio interrumpida por un cáncer que finalmente le quitó la vida a los 49 años. Fue diagnosticada con cáncer de mamas en 1994 y recibió radioterapia, pero la enfermedad se había extendido a sus pulmones e hígado, lo que resultó en una metástasis.
En una entrevista en Humanamente Hablando, Rebeca dijo: Yo no peleo contra el cáncer, yo al cáncer trato de mirarlo y decir, qué he hecho yo, qué ha pasado conmigo que tú te has instalado en mí. Añadió que la enfermedad le había enseñado a pedir amistad y a entender la importancia de no querer estar solo.
Rebeca falleció el 20 de septiembre de 2003 en su hogar en El Arrayán, Santiago, a los 49 años. Su muerte fue una gran pérdida para la comunidad teatral y televisiva chilena. Gloria Münchmeyer dijo en aquel entonces: Ella ascendió en forma tan linda que es un ejemplo. La Rebeca era una actriz deliciosa, inteligente y con una elegancia especial… muy buena y muy buena para la comedia también, afirmó el actor Cristián Campos.