La tecnología de identificadores descentralizados y credenciales verificables está revolucionando la creación de una internet soberana, donde individuos y entidades tienen el control total sobre su identidad digital. Esta tecnología ha despertado el interés de empresas y gobiernos que compiten por el dominio de la identidad en línea.
Hace un par de años, el ex CEO de Twitter, Jack Dorsey, actual CEO de Block, e influencer de Bitcoin, anunció el nacimiento de TBD, una empresa que trabaja en el desarrollo de Web5, una fusión de las capacidades de Web2 y Web3. Aunque TBD ha mantenido un perfil bajo y su proyecto parece ser de nicho, la tecnología en la que trabajan está ganando terreno en la infraestructura de la identidad en línea.
TBD está desarrollando dos proyectos principales: tbDEX y Web5. El primero se centra en la construcción de mercados descentralizados DEX y no será el foco de este artículo. Por otro lado, Web5 busca construir una alternativa a Web3, pero en lugar de basarse en altcoins, se apoya en una tecnología llamada identificadores descentralizados DID y, de forma tangencial, en Bitcoin.
Los DID son identificadores de recursos uniformes URI que hacen referencia a un documento con detalles sobre la entidad a la que pertenecen. Estos documentos contienen una clave pública asociada a la entidad identificada, lo que permite verificar y validar su autenticidad en las comunicaciones.
Las credenciales verificables VC son afirmaciones que las entidades hacen unas sobre otras y pueden ser verificadas sin la necesidad de una autoridad que las valide. Esto permite un tipo de identidad auto-soberana, ya que el usuario es quien decide qué datos personales compartir.
Existen diferentes métodos para almacenar y recuperar los documentos DID, como IPFS, ION, did:web, did:ethr, y did:btcr, entre otros. Algunas empresas y gobiernos están adoptando esta tecnología para garantizar la seguridad y la privacidad de la identidad digital de los usuarios.
Aunque los DID aún no son ampliamente utilizados, diversas organizaciones, como Microsoft, Corea del Sur, y la Ciudad de Buenos Aires, están trabajando en su implementación. Esto puede representar el inicio de un modelo abierto y auto-soberano de identidad digital, que no está controlado por ninguna entidad en particular.
En resumen, la tecnología de identificadores descentralizados y credenciales verificables está configurando una internet más soberana y segura, donde los usuarios tienen el control total sobre su identidad digital. Aunque aún no es una tecnología masivamente adoptada, diversos actores del sector público y privado están contribuyendo a su desarrollo y adopción.