Rusia está buscando en las criptomonedas una herramienta para eludir las sanciones económicas, según ha declarado la secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Janet Yellen. Esto ocurre después de que Rusia aprobara regulaciones que permiten realizar pagos transfronterizos con criptomonedas y legalizaran la minería de Bitcoin en el país.
La secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Janet Yellen, ha anunciado que seguirán de cerca las acciones de Rusia en relación a las criptomonedas. Yellen declaró que han estado atentos al posible uso de criptomonedas y stablecoins como vía para evadir las sanciones, aunque desestimó su poder. No obstante, expuso sus preocupaciones al considerar que su uso puede intensificarse a medida que las sanciones se vuelven más severas.
El Banco de Rusia ha alentado a las empresas a adoptar las criptomonedas como medio para concretar sus pagos internacionales. Esto se debe a que las dificultades generadas por las sanciones han obligado a muchos empresarios a recurrir a las stablecoins y a la minería de Bitcoin. El gobierno ruso está buscando desarrollar, lo más pronto posible, un sistema alternativo de pago utilizando criptomonedas, con el fin de solventar la problemática que existe para ejecutar pagos transfronterizos y sostener el comercio internacional.
El congresista estadounidense Brad Sherman también se pronunció sobre el tema, señalando que la única ventaja que ofrecen los criptoactivos a Rusia es la evasión de las sanciones y otras leyes, incluidas las leyes fiscales. Por lo tanto, tanto Yellen como Sherman aseguraron que estarán monitoreando el uso de criptomonedas en Rusia, a fin de garantizar que las sanciones económicas permanezcan vigentes y sean efectivas.
En resumen, Rusia está buscando en las criptomonedas una herramienta para eludir las sanciones económicas, lo que ha llevado a los Estados Unidos a anunciar que seguirán de cerca las acciones de Rusia en relación a las criptomonedas. Se espera que las transacciones con criptoactivos se incentiven significativamente en Rusia a partir del próximo mes de septiembre, cuando entran en vigor las nuevas leyes rusas.