Durante los primeros seis meses del gobierno de Bernardo Arévalo en Guatemala, la tasa de homicidios ha experimentado una disminución, situándose en 16 casos por cada 100.000 habitantes. Esta cifra representa una reducción en comparación con el mismo período del año anterior, cuando la tasa fue de 16,7, según informó la Agencia Guatemalteca de Noticias AGN.
La AGN ha atribuido esta disminución a una tendencia decreciente en los niveles de criminalidad en el país desde 2009, cuando la tasa de homicidios alcanzó un máximo histórico de 46,5 por cada 100.000 habitantes. La tasa más baja se registró en 2020, a raíz de las restricciones de movilidad impuestas por la pandemia de COVID-19, con una tasa de 15,2.
El Centro de Investigaciones Económicas Nacionales CIEN y la Policía Nacional Civil PNC son las fuentes de los datos de criminalidad en Guatemala. Los datos del CIEN indican que mayo ha sido el mes con más homicidios en lo que va de año, con un total de 247 asesinatos, incluidos 240 adultos y siete menores de edad. Le sigue abril, con 236 homicidios, incluidos 228 adultos y ocho menores.
En los demás meses del año, se han registrado los siguientes números de homicidios: en enero, 227 adultos y 20 menores; en febrero, 156 adultos y seis menores; en marzo, 205 adultos y nueve menores; y en junio, 234 adultos y siete menores.
A pesar de esta disminución en la tasa de homicidios, Guatemala sigue siendo uno de los países más violentos de América Central. El gobierno de Arévalo se ha enfrentado a importantes desafíos en materia de seguridad desde su toma de posesión en enero.