En River se sentía con fuerza la necesidad de un cambio urgente, lo que llevó a la decisión de poner fin al ciclo de Martín Demichelis como entrenador. Esta determinación descomprimió la situación de manera drástica, dando paso a una despedida con gran dolor pero también con grandeza y altura. Aunque los directivos fueron los que tomaron la decisión de despedirlo, se aseguraron de que el adiós fuese lo más amoroso y reconociendo posible para el técnico.
Sin embargo, no fue suficiente con haber ganado el grupo de la Copa Libertadores como el mejor primero, ni tampoco importó el hecho de que los octavos de final comenzarían a mediados de agosto. La eliminación en la Copa Argentina frente a un equipo de segunda división y una serie de partidos perdidos contra equipos más modestos precipitaron la salida de Demichelis, que ya se venía rumoreando desde el año pasado cuando se filtró una charla con periodistas que disgustó a los referentes.
Los hinchas habían comenzado a silbar al entrenador cada vez que se pronunciaba su nombre y apellido en el estadio. Sin embargo, el partido contra Sarmiento en el Monumental fue diferente, ya que se sabía que el DT dejaría el cargo después del partido. Los hinchas estaban predispuestos a despedirlo de buena manera y así lo hicieron, con aplausos y un video institucional en la pantalla gigante agradeciéndole por los tres títulos nacionales ganados en este año y medio.
Durante el partido, Franco Mastantuono anotó un gol de tiro libre en el último minuto, dándole la victoria a River y corrió a abrazar a Demichelis, quien lo hizo debutar. Después del partido, Demichelis se despidió de sus colaboradores, jugadores, directivos y leyendas del club como Ubaldo Fillol y Norberto Alonso.
A pesar de que los hinchas habían pedido su salida y lo habían maltratado en partidos anteriores, al final del partido le cantaron Micho es de River y de River no se va. Demichelis respondió con un gesto de pedido de perdón y agradecimiento.
En su discurso de despedida, Demichelis agradeció al club y reconoció que tuvo que sacrificar su vida personal por River. También hizo un pedido a la prensa para que no mientan sobre la relación entre los jugadores y él.
Por otro lado, se rumorea que el sucesor de Demichelis será Marcelo Gallardo, quien habría puesto como condición manejar absolutamente y con total libertad el fútbol profesional. La dirigencia de River está en conversaciones con Gallardo para confirmar su regreso al club.