PAMPLONA, 8 de Julio. Agencia de Noticias -
Un mar de personas se congregó hoy en la avenida Roncesvalles de Pamplona, recordando a Germán Rodríguez, quien perdió la vida a manos de la policía durante los trágicos sucesos de las fiestas de San Fermín en 1978. La multitud se reunió en torno a la estela erigida en su memoria, como es tradición cada 8 de julio.
El emotivo homenaje estuvo marcado por una clara postura contra lo que se denominó como el genocidio que está cometiendo Israel contra Palestina, con banderas de Palestina y lemas como Boicot a Israel y Estado sionista, estado terrorista.
Desde un escenario colocado junto a la estela, jóvenes del Casco Viejo de Pamplona leyeron un manifiesto, destacando la importancia de una memoria que no se quede anclada en el pasado, sino que reivindique a los verdaderos caídos, los de su clase y su pueblo. Se hizo hincapié en el cambio que han experimentado las calles y plazas del barrio, pasando de una marginalidad central a una incipiente turistificación, donde las antiguas tiendas de barrio han sido reemplazadas por casas de apuestas.
Sin embargo, los muros y esquinas del barrio, desde el monolito hasta el nuevo mural de la calle Descalzos, siguen siendo un fiel testigo de la memoria y los sueños de Germán Rodríguez. Desde la plataforma SF78 Gogoan, se subrayó que han pasado 46 años desde aquellos Sanfermines, 46 años en los que se les sigue negando el derecho a la justicia, verdad y reparación. Pero, aseguraron, su lucha contra la impunidad continuará.