La anotación de Bellingham contra Eslovaquia no solo forzó la prórroga, sino que también dejó una huella imborrable en el entrenador de Inglaterra, Gareth Southgate, quien parecía ser un hombre de principios inquebrantables. Aunque la sanción de Guéhi y los problemas físicos de Trippier también pudieron haber influido en su decisión, se dice que Southgate estaría considerando seriamente cambiar el tradicional sistema 4-2-3-1 de los Three Lions por un esquema más ofensivo y atractivo como el 3-4-3, con Bellingham y Foden como mediapuntas.
La inclusión segura en el once inicial será la del defensor Konsa, quien sustituirá a Guéhi, ya sea como tercer central o como apoyo de Stones. Por otro lado, Trent-Alexander Arnold, quien ha tenido un comienzo difícil en el torneo, podría ser reubicado como lateral derecho, con Bukayo Saka pasando al lateral izquierdo.
Aunque Suiza solo ha logrado tres victorias en 27 enfrentamientos contra Inglaterra, el equipo de Murat Yakin ha demostrado ser una fuerza a tener en cuenta en esta Eurocopa. Tras empatar con Alemania y derrotar a Italia en los octavos de final, Suiza no tendrá miedo de arrebatarle la posesión a Inglaterra.
El éxito de Suiza se debe en gran parte a su trabajo en equipo y al liderazgo de Granit Xhaka, quien junto a Freuler, forma uno de los mejores centros del campo del torneo. Además, Suiza ha anotado siete goles en el torneo, gracias a su capacidad para jugar al espacio y a la velocidad de Ndoye y Embolo.
En resumen, la victoria de Inglaterra contra Eslovaquia podría haber dejado una impresión duradera en el entrenador Southgate, quien podría estar considerando cambiar el sistema de juego de su equipo. Por otro lado, Suiza ha demostrado ser un oponente formidable y no tendrá miedo de enfrentarse a Inglaterra en la batalla por los cuartos de final.