Inaudito Un individuo de 38 años es capturado en Burgos por amenazar con un cuchillo y una maza a varias personas, incluso en presencia de menores. Un verdadero escándalo en las calles de la ciudad
La trifulca comenzó en la madrugada del jueves 27 de junio, cuando los servicios de emergencia recibieron una llamada alertando sobre una agresión en la plaza de Bernardas. Un hombre, armado y furioso, amedrentaba a los transeúntes y causaba pánico entre los presentes.
Raudos y valientes, los agentes de la Policía Local y Nacional llegaron al lugar, pero el sospechoso había huido, dejando atrás el cuchillo y la maza, que fueron recuperados gracias a la intervención de varios ciudadanos.
No obstante, la historia no acabó ahí. Los agentes, con las descripciones de los testigos, reconocieron al agresor, que había sembrado el caos dos horas antes en otro establecimiento del Distrito Norte. Y, para rematar, en el local de la plaza de Bernardas, uno de los trabajadores resultó herido por el cuchillo del energúmeno.
Ante tal situación, los policías no dudaron en solicitar asistencia médica y emprender la búsqueda del presunto autor. Y, como en una novela de misterio, el sospechoso reapareció de forma inesperada, atacando a varios de los implicados. Un final de infarto Los agentes lograron reducirlo y esposarlo, pero el hombre se mostró violento y resistente, llegando a forcejear con los policías.
En la detención, se encontró entre sus pertenencias unas tijeras, sumándose a la lista de armas que portaba. El individuo fue puesto a disposición judicial, junto con el arsenal incautado.
Pero la violencia no se detuvo allí. Tan solo dos días antes, la Policía Local y Nacional arrestaron a otro varón, de 36 años, por presuntamente agredir a una mujer en un domicilio de la calle Igualdad. Los agentes encontraron a la víctima lastimada y a menores que habían sido testigos de la escena. El agresor fue trasladado a los calabozos y también quedó a disposición judicial.
Burgos, una ciudad tranquila y hermosa, se ve sacudida por estos episodios de violencia y locura. Esperemos que la justicia actúe con celeridad y severidad, para que estos hechos no vuelvan a repetirse.