El canciller chileno, Alberto Van Klaveren, arremetió una vez más contra el fiscal venezolano, Tarek William Saab, tildándolo de indigno para dar lecciones sobre el lamentable caso del exmilitar antichavista, Ronald Ojeda. Esto, luego de que Saab acusara a los servicios de inteligencia chilenos de estar detrás del asesinato de Ojeda en febrero pasado en Santiago.
En una entrevista en un medio local, Van Klaveren se mostró indignado por las inaceptables, desconcertantes y mal fundamentadas declaraciones del fiscal general venezolano. Además, agregó con ironía que el fiscal se atrevió a darles lecciones sobre cómo llevar a cabo una investigación penal.
El ministro de Relaciones Exteriores no estuvo solo en sus comentarios, ya que otras autoridades del Ejecutivo también arremetieron contra las palabras de Saab y reafirmaron que la investigación en Chile se está llevando a cabo de manera seria y responsable. La ministra del Interior, Carolina Tohá, advirtió que Chile llevará el caso a los foros internacionales y expresará su malestar por la forma en que la autoridad venezolana se refirió a la investigación.
La víctima, un disidente del gobierno de Nicolás Maduro y asilado político en Chile, fue secuestrada en febrero y encontrada muerta diez días después en una localidad periférica, enterrada bajo un bloque de cemento. El fiscal chileno a cargo del caso, Héctor Barros, vinculó el crimen con la banda criminal Tren de Aragua y solicitó la cooperación de las autoridades venezolanas para esclarecer los hechos.
Hasta ahora, solo hay un joven venezolano detenido en Chile, pero hay otros dos sospechosos con órdenes de detención que, según las autoridades chilenas, se encuentran en Venezuela.
Saab, por su parte, aseguró el miércoles que el crimen de Ojeda fue una operación para enturbiar las relaciones entre ambos países, involucrando a cuerpos de inteligencia chilenos y extranjeros con intereses espurios. Además, rechazó que los dos sospechosos vayan a ser extraditados a Chile en caso de ser detenidos.
Van Klaveren declaró que Chile espera una señal más positiva de parte del gobierno venezolano, tras el envío de la nota de protesta. Este caso ha estado causando fricciones entre ambos países y acusaciones de falta de cooperación por parte de Chile hacia Venezuela.
El presidente chileno, Gabriel Boric, ya había llamado a consultas a su embajador en Caracas, Jaime Gazmuri, el pasado 11 de abril, pero finalmente regresó a sus funciones diplomáticas unos días después.
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