María Gabriela de Faría enamora a fans con tierna fotografía junto a su progenitor

La actriz venezolana María Gabriela de Faría no tiene pelos en la lengua cuando se trata de su vida personal En las redes sociales, la estrella de Isa TKM comparte momentos íntimos con su familia y su esposo, Christian McGaffney. Incluso, de vez en cuando, regala a sus seguidoras imágenes de su padre, Antonio De Faría, un auténtico sex symbol a su edad

A pesar de que sus padres, Antonio De Faría y María Gabriela Chacón, viven en Venezuela y ella reside entre Estados Unidos y España, su vínculo es indestructible. Cuando tienen la oportunidad, se reúnen para disfrutar de días de ensueño juntos.

Hace unos meses, la actriz pasó tiempo en familia en las playas de Miami Beach, donde se les vio muy felices en compañía de Valentina, la sobrina de la artista. Además, demuestra que sus progenitores tienen una hermosa relación con su esposo, a quien conocen desde hace años.

Las seguidoras no pueden evitar elogiar al empresario, quien a su edad se ve mejor que nunca y conquista al público con sus ojos claros y encantadores. En las publicaciones de la actriz, se pueden encontrar jocosos comentarios que alaban a su padre. Dios mío, qué ganas de que me pidas la bendición, Qué bello es tu papá, todo un galán, Hola, hijastra Un placer, De repente, provoca ser tu madrastra, El verdadero significado de un sugar daddy, Dios me lo cuide, escriben las usuarias.

Por otro lado, Antonio es muy activo en redes sociales y comparte su día a día, así como el éxito de su restaurante Pika’s, ubicado en El Paraíso, Caracas. Sus más de 49 mil seguidores no dudan en halagarlo por su buen aspecto físico.

En el año 2020, Antonio estuvo al borde de la muerte, lo que supuso un duro golpe para la familia. Sin embargo, con el paso del tiempo, logró recuperarse y María Gabriela conmovió a su comunidad de redes sociales con un tierno mensaje: Aunque me preparé para no tenerte, aunque acepté la belleza colateral de tu muerte, esa posibilidad de no tenerte me ha hecho apreciar el regalo de la vida aún más. Aquí estás y casi llegas. Aquí estás y aunque un día no lo estés más, siempre vas a estar.