Misterio en comicios mexicanos: Por qué el silencio sobre el bitcóin por parte de aspirantes presidenciales

La fiebre electoral en México ha alcanzado su clímax, ya que el país se prepara para elegir a un nuevo presidente, 128 senadores y 500 diputados de la Cámara Baja el 2 de junio. Sin embargo, en medio de esta agitación, los temas relacionados con bitcoin y las criptomonedas han sido relegados al olvido, y los candidatos parecen más interesados en abordar temas como la seguridad, la reforma judicial, la igualdad de género y la soberanía energética.

Según una encuesta reciente, el 40% de los mexicanos desearía que los candidatos presentaran planes sobre bitcoin, pero hasta ahora, solo dos de los tres principales candidatos han hecho mención específica al ecosistema de las criptomonedas. Claudia Sheinbaum, la candidata que lidera las encuestas y abanderada del partido gobernante Morena, ha expresado su oposición al uso de criptomonedas, siguiendo la postura conservadora de su partido en materia financiera.

Por otro lado, Xóchitl Gálvez, senadora de la coalición Fuerza y Corazón por México, ha prometido la incorporación de blockchains en el sistema de salud, pero ha descartado invertir en criptomonedas y ha desestimado la idea de actuar como lo ha hecho el presidente de El Salvador, Nayib Bukele. Jorge Álvarez Máynez, del partido Movimiento Ciudadano, se ha mostrado más abierto a la idea de utilizar la tecnología de las criptomonedas para combatir el lavado de dinero, aunque tampoco ha presentado una propuesta clara al respecto.

La falta de interés en el ecosistema de bitcoin durante la campaña electoral puede atribuirse a las preocupaciones urgentes que aquejan a los mexicanos, como la inseguridad y la economía. México se encuentra entre los países más violentos del mundo y enfrenta desafíos económicos y de salud significativos. Además, la actitud conservadora en materia de finanzas tanto del gobierno como de los candidatos ha contribuido a que bitcoin quede fuera de la agenda electoral.

Sin embargo, es importante destacar que México ocupa el tercer lugar en América Latina y el puesto 16 a nivel global en términos de adopción de criptomonedas, según el ranking de Chainalysis. El país cuenta con más de 3,1 millones de poseedores de criptomonedas, lo que representa el 2,5% de la población. Esto plantea la pregunta sobre las razones por las que los candidatos han descuidado este ecosistema en crecimiento.

Felipe Vallejo, director general de Bitso en México, cree que las criptomonedas deberían tener un lugar en la agenda pública y que su adopción podría influir en la decisión de los votantes. Sin embargo, las criptomonedas no solo han sido descuidadas en la agenda electoral, sino también en la agenda del gobierno de AMLO en los últimos seis años. A pesar de los esfuerzos de algunos legisladores y funcionarios públicos por abordar el tema, no se ha logrado una definición clara de la política regulatoria para las criptomonedas en México.

La senadora Indira Kempis, quien compitió por la candidatura de Movimiento Ciudadano en las elecciones presidenciales, ha sido una de las principales defensoras de las criptomonedas en el Congreso mexicano. Su deseo era no solo convertirse en la primera mujer presidenta de su país, sino también en la primera bitcoiner en ocupar el cargo. Sin embargo, su aspiración no se hizo realidad, y el futuro del ecosistema de bitcoin en México sigue siendo incierto.