Scándalo en el fútbol femenino La jugadora estrella de Suecia, Fridolina Rolfö, y otras figuras internacionales se han pronunciado con contundencia al conocer la indignante situación que vivieron tres futbolistas argentinas. Laurina Oliveiros, Julieta Cruz y Lorena Beníte fueron despreciadas y humilladas durante la concentración de su selección
El motivo de su indignación Se les ofreció un plátano y un sándwich como almuerzo, mientras que el resto del equipo disfrutaba de una comida más nutritiva y variada. Un trato absolutamente inaceptable
Pero las quejas de las argentinas no acaban allí. Aseguran que no reciben un salario justo y, peor aún, deben pagar las entradas de sus propias familias para asistir a los partidos. Unas condiciones verdaderamente vergonzosas
Rolfö, jugadora del Barcelona, mostró su apoyo a las argentinas y exigió un cambio inmediato: Esas no son las condiciones adecuadas para alguien que quiere tener éxito y rendir al más alto nivel. Es genial que se hayan puesto firmes y quieran un cambio. Hay muchos casos en el fútbol femenino en los que se requiere un cambio y el comienzo es que las jugadoras hablen.
La situación ha conmovido a la comunidad futbolística y ha generado un debate sobre la igualdad de género en el deporte. La excompañera de Estefanía Banini, Hanna Lundkvist, también se ha pronunciado al respecto: Me da mucha pena saber que todavía es así. Sólo espero que mejore y que esto pueda servir de algo.
Es hora de que las autoridades deportivas tomen medidas y garanticen un trato justo y equitativo para todas las jugadoras de fútbol, sin importar su nacionalidad o género. Basta de discriminación y humillación Exigimos respeto y dignidad para todas las atletas