PALMA DE MALLORCA, Isla de la Calma y la Fiesta, se convirtió en el escenario de una brutal agresión el pasado sábado por la mañana. Un joven colombiano de 28 años, ahora apodado el Vaso Lanzador, fue acusado de arrojar un recipiente de cristal a la cabeza de otro individuo, dejándolo ensangrentado y magullado en el barrio de Pere Garau.
Según testigos presenciales, el sospechoso lanzó el vaso sin mediar palabra, impactando violentamente en la cabeza de la víctima y provocándole heridas que requirieron suturas. La Policía Local acudió rápidamente al lugar de los hechos y, tras recabar pruebas y testimonios, localizaron y detuvieron al presunto agresor al día siguiente.
Resulta chocante saber que tanto el agresor como la víctima estaban bajo la influencia del alcohol cuando se desató la trifulca. Después de las investigaciones realizadas por la Policía Local, el Vaso Lanzador fue entregado al Cuerpo Nacional de Policía, quien elaboró el informe judicial correspondiente por un delito menor de lesiones.
La noticia deja un sabor agridulce en la boca de los residentes y visitantes de Palma, ya que la isla es conocida por su tranquilidad y hospitalidad, y este tipo de comportamientos violentos son una excepción a la regla. Esperemos que el Vaso Lanzador reciba el castigo que merece y que este incidente sirva como advertencia para aquellos que piensan que la violencia es una forma aceptable de resolver las disputas.