
La empresa venezolana Crixto ha anunciado una nueva forma de pago utilizando la stablecoin USDT a través de Binance Pay, pero la comunidad se cuestiona si se trata de una verdadera asociación o solo una integración de API. Un análisis realizado indica que el uso de este servicio resulta ser un 7% más costoso que realizar la conversión en el servicio P2P de Binance.
La integración de Crixto con Binance Pay permite a los usuarios en Venezuela usar el saldo de Binance Pay para realizar compras en comercios locales y recibir bolívares al instante, todo bajo el marco regulatorio de Sunacrip. La iniciativa ha sido recibida con opiniones divididas, algunos la ven como un paso hacia la formalización de servicios con criptomonedas en el país, mientras que otros cuestionan la legitimidad del proceso.
Críticos como el usuario @rufian señalan que las palabras asociación o alianza utilizadas en el video publicado en Instagram de Crixto son engañosas, ya que simplemente se conectaron a una API para que los usuarios envíen pagos a Binance Pay, sin una asociación formal. El silencio oficial de Binance alimenta esta teoría, lo que sugiere que podría tratarse de una integración unilateral de su API.
Otro tema de discusión es el marco regulatorio, algunos ven la jugada como legalmente astuta, mientras que otros discuten su legitimidad. Sin embargo, la pregunta más importante para el usuario es sobre los beneficios prácticos que ofrece una integración entre Crixto y Binance Pay.
De acuerdo al análisis realizado por Ricardo Sánchez, el uso del puente de Crixto resultó ser un 6,98% más costoso que cambiar los USDT a bolívares en el P2P de Binance y pagar directamente. La conveniencia es el beneficio principal, especialmente útil para los usuarios con cuenta en Binance con USDT y no tengan acceso a una cuenta bancaria en bolívares.
En definitiva, la iniciativa de Crixto ha puesto en relieve las complejas capas del sistema financiero venezolano, lo que para unos es innovación y formalización, para otros es una maniobra de marketing costosa con un respaldo regulatorio cuestionable. La respuesta final sobre su éxito y legitimidad no la tendrá un comunicado, sino la adopción del mercado, algo sobre lo que falta educación, y sobre todo, acabar con la estigmatización que hay sobre el sector de las criptomonedas en el país.,