
José Luis N, también conocido como El Mimoso, quien era buscado activamente por las autoridades del Estado de México y la Ciudad de México por ser uno de los principales generadores de violencia en el oriente del Valle de México, fue arrestado recientemente. Además de ser vinculado con la delincuencia organizada, El Mimoso es el líder de la Alianza Mexicana de Organizaciones Sociales AMOS, y se le relaciona con delitos como el despojo y la extorsión, especialmente en el municipio de Los Reyes La Paz.
La AMOS es señalada como una red criminal dedicada al robo, intentos de homicidio, venta fraudulenta de terrenos ejidales y extorsión en la zona alta de la localidad. Presuntamente, El Mimoso y la red criminal de AMOS abusaron de la confianza de decenas de familias que buscaban invertir en su patrimonio.
El Mimoso fue sentenciado a 47 años de prisión en 2015, pero parece haber recuperado su libertad dos años después. En fechas recientes, se le ha vinculado con nuevos actos de despojo en la colonia Lomas de San Sebastián, donde, al parecer, una mujer identificada como Sandra N y un grupo de hombres armados habrían despojado violentamente a al menos 60 familias.
La detención de El Mimoso es solo una de las muchas recientes en el Estado de México, donde las autoridades locales y federales han intensificado sus esfuerzos para combatir el despojo y la delincuencia organizada. A inicios de junio, once presuntos delincuentes fueron arrestados y vinculados a proceso, seis de ellos pertenecientes a la Unión de Sindicatos y Organizaciones Nacionales USON con operaciones en varias localidades del Estado de México. Otras siete personas, pertenecientes a diversos grupos delictivos, también fueron detenidas y vinculadas a proceso en relación con delitos como el despojo, la extorsión y el secuestro.
En resumen, las autoridades del Estado de México y la Ciudad de México han intensificado sus esfuerzos para combatir la delincuencia organizada y el despojo en la región. La reciente detención de El Mimoso y otros presuntos delincuentes es un paso importante en este sentido, pero aún queda mucho trabajo por hacer para garantizar la seguridad y el estado de derecho en la zona.,