
El verano en el norte de Londres se asemeja a una versión interminable de túneles, en especial para el Chelsea, ya que por séptimo año consecutivo, la entidad se dispone a gastar una cantidad escandalosa de millones para adquirir al próximo gran talento del fútbol. La mayoría de estas transacciones han resultado infructuosas, aunque siempre existe la esperanza de que algún día el esfuerzo se vea recompensado.
La rutina sigue siendo la misma: un desembolso multimillonario por un futbolista que ha brillado durante la temporada reciente. El caso más reciente es el de Jamie Bynoe-Gittens, quien será la nueva sensación si todo sale según lo planeado. Tras una temporada exitosa, con importantes goles incluso en la Liga de Campeones, el delantero inglés, criado en la academia del Manchester City, está muy cerca de unirse al Chelsea después de que se llegara a un acuerdo con el Borussia Dortmund por un valor de 63 millones de euros, según el Daily Mail. Sin embargo, la oferta inicial del Chelsea fue rechazada por considerarla insuficiente, lo que obligó a los blue a elevar su oferta y a pagar la cláusula de rescisión del jugador.
La posición de extremo en el Chelsea no escasea en jugadores, ya que, además del intocable Palmer, también se encuentra Madueke, Pedro Neto, Nkunku, Joao Félix, y el sancionado Mudryk. Con tantos jugadores compitiendo por el mismo puesto, será necesario que alguno de ellos deje el equipo en busca de más minutos y oportunidades de juego. El fichaje de Bynoe-Gittens podría ser el catalizador para que se produzca una salida importante en la plantilla de Stamford Bridge, aunque solo el tiempo lo dirá.,