
El gobierno de Venezuela acusó al Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, de usar políticamente la defensa de las libertades fundamentales. La acusación fue realizada por el canciller Yván Gil a través de un comunicado en Telegram, en respuesta a las declaraciones de Türk en Ginebra, donde alertó sobre la deteriorada situación de los derechos humanos en Venezuela después de las elecciones presidenciales y parlamentarias.
Según el gobierno de Nicolás Maduro, la gestión de Türk en la ONU será recordada como una de las más dañinas en su historia. El canciller venezolano criticó las declaraciones de Türk por ser irresponsables, parciales y profundamente politizadas, ya que mencionó detenciones arbitrarias, violaciones del debido proceso, desapariciones forzadas y torturas en el proceso electoral. Además, el canciller acusó a Türk de ser una herramienta de los intereses imperialistas de los Estados Unidos, lo que desacredita su labor.
El gobierno venezolano también reprochó el silencio de Türk sobre el caso de 252 venezolanos deportados desde los Estados Unidos y detenidos en El Salvador. La oficina de derechos humanos de la ONU advirtió previamente que este grupo podría estar en riesgo de desaparición forzada debido a la incertidumbre sobre su paradero.
Esta no es la primera vez que el gobierno de Venezuela cuestiona la defensa de los derechos humanos por parte de la ONU. Anteriormente, han habido denuncias de periodistas detenidos, violaciones del derecho al asilo diplomático y criminalización de activistas y periodistas.
En resumen, el gobierno de Venezuela acusó al Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos de usar políticamente la defensa de las libertades fundamentales y criticó su silencio sobre el caso de venezolanos deportados desde los Estados Unidos. La situación de los derechos humanos en Venezuela sigue siendo una preocupación internacional.,