
El pasado miércoles, la Cámara de Apelaciones de Trelew ratificó la sentencia contra Ricardo La Regina, un empresario acusado de daño ambiental y maltrato animal por la matanza de pingüinos en Punta Tombo. La corte, compuesta por Adrián Barrios, Cesar Zaratiegui y Alejandro Defranco, rechazó unánimemente el pedido de libertad condicional solicitado por la defensa del condenado, Federico Ruffa.
Ricardo La Regina fue hallado culpable por el uso de maquinaria pesada en su propiedad, lo que resultó en la destrucción de un área protegida y la muerte de varios pingüinos, así como la destrucción de sus nidos. Durante el juicio, la defensa de La Regina propuso donar tierras para ampliar la reserva como parte de un acuerdo para evitar la condena, pero la propuesta fue rechazada por los jueces.
El tribunal impuso a La Regina una sentencia de tres años de prisión condicional, junto con estrictas normas de conducta, como la prohibición de conducir vehículos pesados en zonas sensibles al ecosistema, la obligación de cooperar en la restauración ambiental en la estancia La Perla, y la prohibición de realizar obras sin la autorización y los informes de impacto ambiental aprobados por las autoridades provinciales.
La corte también ordenó el decomiso de la retroexcavadora utilizada en la comisión de los delitos, reconociendo su papel instrumental en la ejecución de los hechos. Matías Arrigazzi, especialista en biodiversidad de Greenpeace Argentina, celebró la decisión del tribunal y señaló que el caso de La Regina es un ejemplo claro de daño directo a los pingüinos y la naturaleza, y que gracias a la justicia, el delito no quedó impune. No obstante, Arrigazzi subrayó la necesidad de fortalecer y respetar la protección del ambiente a nivel nacional, y avanzar en la penalización de los delitos ambientales.,