
La denuncia presentada por varios policías locales contra un abogado de la administración de Justicia LAJ de la Audiencia Provincial de Palma por la supuesta obstrucción en el caso Cursach ha sido desestimada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Palma. La denuncia, que acusaba al LAJ de demorar intencionalmente la investigación, ha sido archivada por falta de indicios de delito de prevaricación.
El magistrado responsable del caso argumenta que el retraso en la tramitación de la ejecución de la sentencia del caso Cursach no implica necesariamente un acto delictivo. La causa era compleja, con numerosas partes implicadas y órdenes judiciales pendientes de resolver, lo que ralentizó el proceso natural. El juez descarta cualquier intención maliciosa o interés personal del LAJ en perjudicar a las partes.
El denunciante, el abogado Vicente Campaner, había argumentado que el LAJ había actuado con negligencia al no cumplir inmediatamente las órdenes de la Audiencia de deducir testimonio contra los investigadores del caso Cursach, el exjuez Manuel Penalva, el exfiscal Miguel Ángel Subirán y cuatro antiguos agentes de la Policía Nacional. Sin embargo, el magistrado recuerda que la sentencia no era firme y podía ser recurrida ante el Tribunal Supremo, por lo que los testimonios no podían deducirse inmediatamente.
Por último, el magistrado señala que la afirmación de una supuesta connivencia entre el LAJ y tres jueces del Tribunal Superior de Justicia de Baleares resulta sorprendente y grave. Sin embargo, la denuncia no aporta evidencia alguna de esta relación, por lo que considera que los hechos denunciados carecen de verosimilitud y no podrían estimarse como delitos, incluso en presencia de una posible apariencia de delito.
En consecuencia, el magistrado ha decidido no admitir esta parte de la denuncia por falta absoluta de explicación y de pruebas. Y aunque no fuera así, su tribunal no sería competente para instruir estos hechos.,