
Una joven de 15 años relató su experiencia como víctima de un pinchazo en el Metro de la Ciudad de México a principios de abril, en la estación Ermita. Se trataría de uno de los primeros casos de un nuevo modus operandi de ataques contra mujeres en el transporte público.
La menor, asistida por el colectivo No somos una. Somos todas, recibió apoyo para presentar una denuncia ante las autoridades. Fernanda Torres, coordinadora del colectivo, concedió una entrevista al Grupo Multimedios y explicó que este tipo de agresiones contra las mujeres va en aumento, con muchas denuncias diarias y llamadas de auxilio.
La activista mencionó que este nuevo método consiste en pinchar a las víctimas y luego hacer que se sientan débiles o adormecidas para alejarlas de la multitud y robarlas. Alertó que el objetivo de estos ataques puede ser desde el robo hasta delitos de violencia de género.
Según las autoridades, se han registrado 20 casos similares, aunque solo algunas víctimas han dado positivo en exámenes toxicológicos. Ante el aumento de denuncias, las asociaciones civiles exigen a las autoridades la implementación de un protocolo de acción y una investigación exhaustiva de estos hechos.
El colectivo No es una. Somos Todas ha emitido recomendaciones a los usuarios del transporte público para prevenir estos ataques, como tirar de la palanca de emergencia en caso de sentirse mal, llamar a una persona de confianza y compartir su ubicación en tiempo real.
Se insta a las personas que viajan en el Metro a estar atentas y denunciar cualquier actividad sospechosa, así como a tomar medidas de precaución para garantizar su seguridad. Se espera que las autoridades tomen medidas inmediatas para abordar esta situación y garantizar la seguridad de los usuarios del transporte público.,