La semana pasada, el exmandatario de los Estados Unidos generó polémica al calificar de denigrante la participación de dos boxeadoras en la rama femenina de este deporte. Se trata de la taiwanesa Lin Yu-ting y la argelina Imane Khelif, quienes han demostrado su valentía y habilidad en el cuadrilátero.
Es lamentable que, en pleno siglo XXI, se sigan haciendo comentarios despectivos sobre la participación de las mujeres en cualquier disciplina deportiva. El boxeo, al igual que cualquier otro deporte, no distingue género y ofrece las mismas oportunidades a hombres y mujeres.
Lin Yu-ting y Imane Khelif son ejemplos de perseverancia y dedicación, y han demostrado que el boxeo no es solo cosa de hombres. Su participación en este deporte debe ser celebrada y no objeto de críticas o comentarios denigrantes.
Es importante seguir promoviendo la igualdad de género en el deporte y en todos los aspectos de la vida. La participación de las mujeres en el boxeo y en cualquier otra disciplina deportiva debe ser vista como una oportunidad para inspirar a otras mujeres y niñas a seguir sus pasiones y a luchar por sus sueños.