A solo un mes de las cruciales elecciones presidenciales en Venezuela, los dos principales candidatos, Nicolás Maduro y Edmundo González Urrutia, muestran signos de confianza en sus respectivas campañas, con organizaciones masivas y apoyos estimados que les acercan a la victoria. Sin embargo, no están solos en la contienda, ya que ocho candidatos más, aunque sin posibilidades reales de ganar, han generado revuelo y prometen aumentar la intensidad a medida que se acerca el 4 de julio, fecha en que comienza formalmente la campaña.
Un total de 21.620.705 venezolanos están llamados a las urnas el 28 de julio, en una jornada de 12 horas que muy probablemente se prolongue más allá de las 18:00 hora local 22:00 GMT en caso de que haya votantes en cola. Este censo se ve afectado por la migración, ya que, según agencias de la ONU, unos 7,7 millones de venezolanos han abandonado el país en la última década, y solo 69.211 podrán votar en el extranjero. El gobierno, sin embargo, rechaza estas cifras y afirma que solo 2 millones de venezolanos han emigrado, y que la mitad ha regresado.
Instancias internacionales, como la ONU, han confirmado su participación en misiones de veeduría, a pesar de la revocación de la invitación a la UE. La campaña de González Urrutia asegura que cuenta con más de 50.000 equipos de promotores, esperando desplegar 600.000 personas para vigilar el proceso, especialmente considerando que el CNE actúa a favor del chavismo. Por su parte, el chavismo ha activado una aplicación digital y cuenta con miles de formularios con datos de votantes para buscar apoyos.
La carrera presidencial se ha convertido en un espectáculo entre la ampliamente promocionada candidatura de Maduro y la de González Urrutia, que ha acumulado un gran apoyo en las redes sociales. Ambos candidatos han intensificado sus actos de masas en las últimas dos semanas y prevén continuar haciéndolo durante los 21 días de campaña. González Urrutia ha formado una alianza con la líder opositora María Corina Machado, mientras que Maduro, apodado el gallo fino de la contienda, se ha proclamado a sí mismo como el candidato a vencer.
En medio de una aparente guerra de encuestas, las firmas más tradicionales dan una ventaja de entre 20 y 40 puntos a González Urrutia sobre Maduro, quien ha estado en el poder desde 2013. Sin embargo, un grupo de nuevas encuestadoras, algunas creadas este mismo año, siguen situando a Maduro como el favorito.
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