El controvertido Tareck El Aissami, considerado uno de los más cercanos colaboradores del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, hizo un llamado enérgico a los Estados Unidos para que reconozca de forma inmediata los resultados de la votación en la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la reconsideración de la membresía plena de Palestina en la organización. La votación contó con un respaldo abrumador de 143 de los 193 Estados miembros, dejando en claro la postura aislada y arbitraria de los Estados Unidos, que con su derecho a veto y posición de poder ha impedido hasta ahora la entrada de Palestina como miembro pleno.
La resolución adoptada por la Asamblea General concede a Palestina nuevas competencias que van más allá de su estatus actual de Estado observador no miembro. El gobierno venezolano, conocido por su postura firme en apoyo a los derechos palestinos, celebró la victoria diplomática del valiente pueblo palestino en la ONU, donde solo 9 países votaron en contra y 25 se abstuvieron.
El Ejecutivo chavista instó al cese inmediato del fuego en la Franja de Gaza y exigió el fin del genocidio que ha dejado un saldo trágico de más de 34.943 muertos, incluidos 15.000 menores de edad, y 78.572 heridos, además de 10.000 cuerpos desaparecidos bajo los escombros. Israel comenzó su ofensiva en respuesta a un ataque del brazo armado de Hamás el 7 de octubre, que incluyó el lanzamiento de más de 4.000 cohetes y la infiltración de unos 3.000 milicianos que mataron a unas 1.200 personas y secuestraron a más de 240 en comunidades israelíes cercanas a Gaza.
El Ministerio de Sanidad de la Franja, controlado por Hamás, informó sobre el trágico saldo de la guerra que dura ya más de siete meses. Venezuela, conocida por su postura en defensa de los derechos humanos, exigió a la justicia internacional que determine las responsabilidades por los crímenes de lesa humanidad cometidos desde el Estado de Israel.
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