
La temporada recién finalizada fue testigo de la introducción de un innovador formato de la Liga de Campeones de la UEFA, una respuesta directa a la propuesta de la Superliga y un intento por aumentar la emoción a lo largo de la competición. El éxito de esta iniciativa fue evidente, especialmente para el Paris Saint-Germain, que se alzó con el trofeo por primera vez en su historia, demostrando una sed de victoria tras haber tenido que sortear la fase preliminar de clasificación y haber estado al borde de la eliminación en la fase de grupos.
Sin embargo, la UEFA ha anunciado recientemente una transformación aún más impactante en la fase eliminatoria a partir de octavos de final, inspirada en las opiniones de los fanáticos y expertos. En esta edición, el orden de local y visitante para los partidos eliminatorios se decidía al azar, pero a partir de ahora, los equipos con mejor clasificación tendrán la ventaja de jugar como locales en la vuelta de cada eliminatoria.
Este cambio se aplicará no solo en la Champions League masculina, sino también en la Europa League, la Conference League y la Champions League femenina. La medida garantizará una mayor justicia en la competición, ya que los cabezas de serie tendrán la ventaja de jugar en casa en la vuelta, lo que les dará una oportunidad adicional de avanzar a la siguiente ronda.
Por lo tanto, si un equipo vence a un oponente clasificado más alto, heredará automáticamente esta ventaja en los cruces posteriores, siempre y cuando no sea eliminado. Esta nueva regla incentivará a los equipos a dar lo mejor de sí en la fase de grupos, ya que el orden de clasificación tendrá ahora una importancia aún mayor en la fase eliminatoria de la competición.,