
Tras el robo de 33 toneladas de oro y plata en la autopista Guadalajara-Colima el pasado viernes, las autoridades de Jalisco y la Guardia Nacional han logrado evitar otro asalto en la misma ruta. Los hechos tuvieron lugar en el kilómetro 13, cerca del municipio de Zacoalco de Torres, donde una furgoneta Nissan Estacas con caja seca transportaba un cargamento de cigarrillos valorado en 3 millones de pesos.
La unidad de carga fue interceptada por un grupo armado que disparó contra el automóvil de escolta, resultando herido un custodio. Tras el ataque, el vehículo de escolta se dirigió a la caseta de peaje de Acatlán de Juárez para solicitar ayuda, lo que llevó a la implementación de un operativo por parte de varias corporaciones policiales. Los paramédicos de Protección Civil de Acatlán brindaron atención al custodio herido, quien recibió un balazo en la espalda y fue trasladado a un hospital.
Mientras tanto, los policías estatales y la Guardia Nacional buscaron a los ladrones, pero estos lograron escapar sin llevarse la mercancía. El delegado de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos en Jalisco, Diego Bolio, ha señalado recientemente un aumento en los robos con violencia en las carreteras jaliscienses, particularmente en los Altos de Jalisco y la entrada de Manzanillo. Bolio Corona, delegado de CONATRAM Jalisco, ha destacado que en México hay un déficit de 60 a 70 mil operadores debido a las condiciones de inseguridad y la migración a Estados Unidos.
La falta de presencia policial y la inseguridad en las carreteras federales han llevado a un aumento de robos con violencia en Jalisco, según los transportistas locales. Han solicitado mayor vigilancia y la presencia de policías en las carreteras para disuadir el crimen y garantizar la seguridad de los conductores y sus cargamentos.,